Robótica e Inteligencia Artificial: similitudes y diferencias

Robótica e Inteligencia Artificial son dos tecnologías que, si bien suelen ir de la mano, esto no significa que sean estrictamente lo mismo. En este artículo te contamos cuáles son sus similitudes y diferencias y por qué se trata de un tándem que, sin lugar a dudas, determinará la sociedad y la economía humanas de las próximas décadas. 

Qué son robótica e Inteligencia Artificial 

La robótica es la disciplina que se encarga de hacer robots. Es decir, máquinas que se pueden diseñar y programar para desarrollar tareas determinadas. Por otro lado, al hablar de Inteligencia Artificial se está hablando de la capacidad de solucionar problemas y llevar a cabo tareas, igual que lo hace el ser humano, pero, en este caso, cuando se trata de una inteligencia que no es natural. Es decir, fabricada por el ser humano. 

En otras palabras, se puede hablar de robótica como de la disciplina encargada de diseñar y fabricar el hardware de las máquinas (la parte física). Por el contrario, la Inteligencia Artificial sería tanto el producto como la disciplina encargada de diseñar y producir el software que hará funcionar las máquinas ensambladas por la robótica. 

De este modo, se trata de elementos distintos pero que, en la mayoría de los casos actuales, tienden a darse de forma conjunta. Especialmente en el caso de robots o máquinas cuyas tareas son complejas y deben trabajar con gran cantidad de datos. 

Similitudes y diferencias entre robótica e Inteligencia Artificial 

La principal similitud entre robótica e Inteligencia Artificial es que, ambas disciplinas, trabajan para diseñar y fabricar lo que se puede denominar en términos generales como máquinas o robots inteligentes. Ambas disciplinas trabajan de manera conjunta y, gracias a este trabajo, se logra el desarrollo de distintos modelos de máquinas inteligentes adaptadas a diferentes trabajos o tareas. 

Por otro lado, la gran diferencia entre robótica e Inteligencia Artificial radica en que, cada disciplina, se ocupa del diseño y fabricación de una parte diferente de las máquinas inteligentes. La robótica trabaja con el hardware, mientras que la inteligencia artificial trabaja con el software que dirigirá dicho hardware. 

Aplicaciones de la robótica y la Inteligencia Artificial 

Los usos y aplicaciones que tiene la combinación de robótica e inteligencia artificial son muchas, y, de hecho, cada vez aumenta a mayor velocidad. No obstante, a día de hoy, algunas de las principales aplicaciones que tienen las máquinas inteligentes se dan en los siguientes sectores.

• Automatización de procesos: Por ejemplo en cadenas de montaje o en tareas logísticas relacionadas con el embalaje y el packaging. 
• Atención al cliente: Cada vez son más las máquinas inteligentes que se ocupan de tareas y de trabajos cara al público. 
• Sector sanitario: Algunos ejemplos interesantes que se dan en este sector son algunos tipos de desfibriladores, así como máquinas diseñadas para el diagnóstico de enfermedades y máquinas quirúrgicas, así como algunas máquinas diseñadas para cuidar a personas dependientes. 
• Visión artificial: Otro sector que se vale de las máquinas inteligentes es el de la visión artificial, donde el reconocimiento facial constituye en elemento clave.
• Transporte y distribución: Cada vez son más las máquinas que automatizan labores de transporte y distribución, tanto desde una perspectiva de transporte de pasajeros como desde la perspectiva logística y de distribución de mercancías. 

Robótica e Inteligencia Artificial: el tándem del futuro 

Actualmente, no hay lugar a dudas de que tanto robótica como Inteligencia Artificial son dos tecnologías que han llegado para quedarse. Y no es de extrañar. Gracias a las máquinas inteligentes se han optimizado multitud de tareas y trabajos que, antes, solo podían hacer los seres humanos. 

De hecho, cada vez es más habitual ver entornos de trabajo donde personas y máquinas trabajan mano a mano en el desarrollo de distintas tareas. Es lo que se denomina cobots, o robots colaborativos. Estos robots están diseñados para realizar las tareas más tediosas o que requieren mayor fuerza física y, actualmente, forman parte habitual de muchas fábricas y entornos de trabajo. 

Sin embargo, la presencia de estos robots colaborativos en la sociedad es cada vez mayor, y sus tareas no se limitan solo a aquellas que requieren fuerza física. Sus aplicaciones son útiles en prácticamente todos los sectores y, por ello, no cabe duda de que, poco a poco, los veremos en más entornos diferentes. Otro buen ejemplo de que, robótica e Inteligencia Artificial, forman un tándem perfecto. Un tándem que, sin duda, modelará la economía y la sociedad humanas de las próximas décadas.