Lograr la fidelización de los clientes es el gran desafío de las empresas, donde es importante tener una estrategia sólida para ofrecerles un servicio que asegure que siempre vuelvan a comprar en tu negocio.
Sin embargo, en la actualidad existen distintos tipos de clientes, que con el acceso a la tecnología y a las redes sociales cuentan con una amplia oferta para decidir dónde comprar el producto que desean.
Además, hay diferentes factores que inciden en el proceso de compra, tales como la situación económica, la experiencia previa, gustos, preferencias personales y necesidades que satisfacer.
A continuación, conoce los tipos de clientes y las claves para fidelizarlos.
Este es un tipo de cliente que conoce con mucho detalle lo que le están vendiendo. Tiene un amplio manejo de la información y suele tener muchos argumentos para elegir un producto sobre otro.
Cuando tengas al frente un cliente informado, lo recomendable es seguir un diálogo fluido con él, tener el mismo manejo de datos y estar preparado para cualquier pregunta, donde es probable que te interrumpa o cuestione lo que le dices.
Es un cliente que no tiene muy claro lo que quiere adquirir y en cinco minutos puede estar totalmente decidido por un producto a preferir otro. Le cuesta decidirse y son muy emocionales e impacientes, por lo que es posible que no terminen comprando nada.
¿Cómo tratar a este tipo de cliente? Lo ideal es preguntar qué busca, antes de ofrecerle un producto o servicio. Asimismo, como va a ser una compra emocional, no es necesario dar tanto detalle, sino dar la información precisa y no invadirlo.
Es uno de los clientes más difíciles de tratar, pues ya vienen con la predisposición a discutir o quejarse con la marca, tratando de mostrar que tiene la razón en sus quejas, y poniendo en duda la calidad del producto.
Es importante no perder la calma cuando te toque tratar a este tipo de clientes, procurar no impacientarse y mantener un diálogo fluido, escuchando sus quejas sin tomarlas a modo personal.
A todos nos ha pasado alguna vez que nos cuesta tomar una decisión a la hora de comprar. Por eso debes ayudar al cliente en este proceso para que esté seguro de que es una buena elección, ya que a este tipo de consumidores le cuesta mucho decidir por ellos mismos.
Entre las principales recomendaciones, no hay que dejarlo solo durante la compra, respetar sus tiempos y no ser insistente. Tienes que estar atento y responder de manera cálida todas sus preguntas, sin sobrecargarlo con información.
Este es un cliente que nunca tiene muy claro lo que tiene que comprar. Por ejemplo, si busca un regalo seguro se dará mil vueltas antes de decidirse.
Otra característica es que tampoco saben cómo explicar sus deseos, por lo que necesitas ser paciente y darle calma para que se exprese con claridad. Lo recomendable es que le hagas preguntas que ayuden a descifrar lo que buscan.
Es un cliente que está atento a las oportunidades y busca un beneficio adicional en lo que compra, como por ejemplo una rebaja. Es exigente y un regateador nato.
Para enfrentar a un cliente negociador, la contraparte debe tener habilidades para negociar de vuelta y siempre con el objetivo de destacar el producto o servicio por sobre la competencia. Aunque no debes ceder a todos sus pedidos.
En tiempos en que las redes sociales son una gran vitrina para un negocio, una estrategia que da grandes resultados es que cuando un cliente se siente tan satisfecho con la marca, comparte en sus redes las cualidades del producto que adquirió.
A estos clientes hay que cuidarlos e identificarlos, ya que pueden actuar como embajadores de la marca y difundir un mensaje que favorecerá la reputación de la empresa.
Según una encuesta de ThinkJar, el 72% de los consumidores compartirá su experiencia positiva con una marca con más de 6 personas.
Al igual que los embajadores de marca, el cliente leal es muy importante para la empresa, pues su rol es clave para la fidelización y puede expandir el producto hacia nuevos públicos.
Lo recomendable es saber qué elementos fueron relevantes para el cliente y que lo hicieron sentir afinidad o cariño con la marca.
Este es un caso complejo de cliente, pues son esas personas que aunque no estén contentos con el servicio que adquirieron, igual permanecen con la marca o siguen consumiendo sus productos.
Lo peligroso es que cuando encuentran una oferta mejor, o más económica, es muy probable que no duden en elegir el producto de la competencia.
Otro dato revelador es que según un estudio de Zendesk, el 40% de los consumidores se van hacia la competencia porque se entera de su excelente servicio al cliente.
Como vemos, satisfacer a los distintos tipos de clientes se puede lograr cuando se conoce con detalle sus principales características y donde su satisfacción es la prioridad del negocio.
Y en ese ámbito, es cada vez más importante tener las herramientas adecuadas para identificar sus necesidades y cumplirles con un servicio exitoso que incluya desde una experiencia de entrega bien ejecutada hasta la creación de campañas personalizadas.
En DispatchTrack tenemos las soluciones logísticas que ayudarán a tu negocio a brindar una mejor experiencia de compra y de entrega para todos tus clientes y sus respectivas características.
Por ejemplo, con el software LastMile puedes asegurarte que el pedido de tu cliente llegue en el menor tiempo posible y en las mejores condiciones. La herramienta permite monitorear en tiempo real cada una de tus entregas, y en la app móvil el transportista puede realizar las gestiones en ruta para llegar a su destino en el horario prometido.
¿Y por qué es relevante este tipo de tecnología para tu negocio? Porque ya no basta con identificar qué tipo de cliente tienes al frente, ahora debes asegurar de brindar una experiencia de compra exitosa en cada momento, y en ese objetivo DispatchTrack se convertirá en tu partner ideal para el crecimiento de tu negocio.