La irrupción de las nuevas tecnologías ha modificado nuestra sociedad y nuestra forma de relacionarnos con otras personas, lo que afecta también al ámbito laboral y comercial. Por ello, la transformación digital de las empresas es algo imprescindible, tanto para estar a la altura de lo que los clientes quieren para poder competir en igualdad de condiciones respecto a otras compañías.
Cuando se habla de transformación digital de las empresas se hace referencia al proceso a través del cual los negocios incorporan las nuevas tecnologías a su forma de trabajar y de hacer negocio.
Es decir, se trata de una evolución de las empresas tradicionales a otras que, dedicándose al mismo sector y a la misma labor, han adecuado sus procesos internos y externos al uso de las tecnologías digitales, sobre todo Internet y todo lo que ofrece estar conectado a la red: ecommerce, redes sociales, catálogos online, etc.
Las ventajas que ofrece la transformación digital de las empresas son muchas. Algunas de las más significativas son las siguientes:
El proceso de transformación digital de las empresas es algo que ya está en marcha. Como se ha podido ver, su implementación aporta importantes ventajas para el negocio. Sin embargo, es importante tener en cuenta que, además de las ventajas que aporta, no llevar a cabo la transformación digital de una empresa implica una desventaja clave: competir en desigualdad de oportunidades.
Es decir, además de llevar a cabo la transformación digital de los negocios por las importantes ventajas que implica, también debe hacerse para evitar competir en desventaja con el resto de empresas del sector que sí se han digitalizado. Por ello, la transformación digital de las empresas no es solo recomendable, sino absolutamente necesario e imprescindible, ya que, aquellas empresas que se resistan a este cambio, terminarán siendo expulsadas del mercado por el resto de empresas que sí que lo han hecho.
La transformación digital de las empresas está teniendo como consecuencia el auge de diferentes negocios digitales. Negocios enfocados tanto al sector servicios como a la manufactura, o negocios que combinan ambas actividades. Así mismo, de forma paralela, esto explica el auge de los servicios logísticos, un elemento necesario para que este tipo de modelo de negocio pueda funcionar de forma eficiente.
No se puede pasar por alto que, al vender a través de ecommerce, es necesario establecer canales eficientes que permitan que los productos lleguen al comprador en tiempo en forma. Es aquí donde los servicios de logística cumplen su función principal, y además sirven para añadir valor al producto, ya que de ellos depende en gran medida la experiencia de compra del consumidor y la satisfacción del cliente. Es decir, no basta con vender por Internet, hay que garantizar que la compra llega al cliente en las condiciones en que lo demanda.
Todo esto es posible gracias al uso de herramientas digitales logísticas, que constituyen uno de los elementos clave de la transformación digital de las empresas que operan en el mercado virtual y que comercializan sus productos de forma online.
Las herramientas de Beetrack están pensadas y diseñadas para responder precisamente a las necesidades de estas empresas.
Gracias a PlannerPro by Beetrack se pueden diseñar y planificar rutas de reparto con la máxima optimización posible, minimizando el coste del reparto al mismo tiempo que no se rebajan las expectativas relativas al servicio y la calidad prestado.
Por su parte, LastMile by Beetrack permite monitorizar y controlar todos los aspectos relativos a la entrega de los pedidos. De esta forma no solo se obtiene información muy valiosa que permite mejorar las entregas, sino que además se consigue reducir la incertidumbre de los compradores y se establece un canal de comunicación directo y seguro entre repartidor y cliente, lo que contribuye a mejorar la experiencia de compra y garantiza su satisfacción plena.
De esta forma, tanto PlannerPro by Beetrack como LastMile by Beetrack son herramientas que mejoran la eficiencia de los procesos logísticos de las empresas que operan en Internet. Contribuyen a reducir los costes logísticos y mejoran la experiencia de compra del cliente, lo que se traduce en ventajas competitivas para los negocios a la vanguardia de la era digital y en clientes más felices, clientes que confían plenamente en estas empresas gracias a la experiencia de compra que les brindan.