Sin duda el comercio electrónico se ha instalado con fuerza en nuestro país, no en vano el año 2017 cerró con un alza real de 31,7% real, concretándose sólo en portales nacionales sobre 86 millones de transacciones online, según cifras de la Cámara Nacional de Comercio.
Factor clave en este proceso radica en los últimos dos meses del año. Por una parte, CyberMonday Chile se ha consolidado como uno de los grandes hitos del sector en el año 2011, las ventas alcanzaron tímidamente US$ 15 millones, la realidad del 2017 fue totalmente diferente, superando los US$ 190 millones en compras, resultado de más de un millón doscientas mil transacciones. Diciembre, por otra parte, significó ventas que superaron los US$ 380 millones, superando en poco más de un 30% del registro de 2016.
Sebastián Ojeda, CEO de Beetrack, destaca el cambio cultural vivido en los últimos años, que han transformado a noviembre en el “mes top” de ventas electrónicas en Chile.
“El 2014 y 2015 las ventas de diciembre superaban en un 6% a las ventas de noviembre. Sin embargo, a contar de 2016 se genera un punto de inflexión y noviembre pasa a representar un 21% más comparado a diciembre, tendencia que se ratificó el año pasado, donde ese mes fue un 31% mayor. Las razones de este cambio son claras, por una parte, Cyber Monday se consolidó, con importantes ofertas como una fecha clave del año y, por otra, los grandes actores del retail se han esforzado por alargar el período de compras navideñas comenzando en noviembre el lanzamiento de sus ofertas”.
Estas positivas cifras, sin embargo, experimentan un tradicional “frenazo” en el período veraniego. Efectivamente, las estadísticas de Beetrack muestran que los despachos derivados de ventas electrónicas cayeron respecto a noviembre 2016 un 47% en enero y un 50% en febrero 2017. Si se compara con diciembre 2016, la caída es un poco más leve: enero (-33%) y febrero (-36%) 2017.
Según Ojeda, las razones para esta caída son varias, algunas económicas y otras de tipo cultural. Por una parte, los presupuestos familiares se ven disminuidos por los gastos realizados para Navidad, y por otra, ya han sido destinados a los temas asociados a las vacaciones como viajes y alojamientos. “En este sentido, los meses previos ‘subsidian’ enero y febrero, porque muchas personas realizaron compras online, que aprovecha recreativamente en esas fechas”, explica el ejecutivo.
Por otra parte, cuando las personas están fuera de sus hogares u oficinas existe cierta desconfianza a realizar compras cuyos despachos vayan a lugares no habituales, un aspecto que debiera ir en retroceso en la medida que la logística asociada va en constante mejora.
Sin embargo, otro factor también puede influir. “Por motivos de trabajo las personas están tan conectadas, con tantos dispositivos y redes sociales que a veces resultan invasivos, que en esta época algunos prefieren evadir totalmente, salir de la rutina, ir a lugares alejados y tranquilos, en que la conectividad es escasa y el único fin es conseguir un descanso ideal”, asegura el CEO de Beetrack.
Esta curva descendente que registran las compras online en nuestro país durante los dos primeros meses del año tiene relación inversa con la preferencia de los chilenos por salir de vacaciones durante este periodo. Según la encuesta “Los chilenos y las vacaciones” elaborada por GFK Adimark, un 66% de los chilenos tomó sus vacaciones entre enero y febrero del 2017, cifra que alcanzó el 77% el 2016.
“Para el comercio electrónico los meses de vacaciones son una tarea pendiente en la que queda por avanzar, buscando sintonizar con los requerimientos de los consumidores para este período, que son diferentes al resto del año. La idea es ofrecer un servicio que les permita disfrutar al máximo el tiempo de descanso y dispersión. Hoy, por ejemplo, los supermercados ofrecen despacho a todas las regiones, incluyendo los principales balnearios del país, una tendencia que otros pueden aprovechar”. – Sebastián Ojeda