La gestión de flotas vehiculares es la piedra angular en el desempeño del transporte logístico por parte de las empresas que cumplen funciones de entrega. El nivel de eficiencia de las flotas de transporte es uno de los mayores determinantes de la competitividad y del éxito de los negocios logísticos. Más aún teniendo en cuenta que, por ejemplo, Ciudad de México está entre las cinco ciudades más congestionadas a nivel de tráfico, en todo el mundo.
La plataforma logística en México está evolucionando. Sin embargo, este contexto sobre el tráfico exige una gestión de flotas vehiculares del más alto nivel, lo cual se puede lograr con apoyo de soluciones digitales, tanto para empresas grandes como pequeñas.
Para mejorar la gestión de flotas vehiculares es necesario, primero, medir su rendimiento. Esto es posible con la monitorización de una serie de KPI logísticos enfocados al transporte.
Los indicadores logísticos de flotas de transporte deben diseñarse según las características y los objetivos de cada empresa. Sin embargo, a modo general, algunos de los principales son los siguientes:
Tener un registro de la distancia recorrida por vehículo (en Km) permite controlar la vida útil de este y de sus componentes: cauchos, motor, frenos, entre otros. Con ello, en la gestión de flotas vehiculares es posible trazar planes de mantenimiento preventivo que mantengan a las unidades de transporte en estado óptimo.
Además, también es posible diferenciar cuánta distancia se ha recorrido en procesos comerciales (transporte de mercancías) y no comerciales (movilizaciones no productivas).
Medir la cantidad de mantenimientos de vehículo por cada conductor permite conocer, en cierta medida, el nivel de cuidado que los transportistas tienen con sus unidades. Mientras mayor sea el número de labores de mantenimiento, mayor desgaste técnico le está causando un conductor a la unidad que maneja. Aspecto importante a considerar por las empresas logísticas si no desean tener una fuga constante de dinero.
Relacionado con el punto anterior, en la gestión de flotas vehiculares es necesario medir la cantidad de incidentes por cada transportista. Esto implica tanto incidentes a nivel de funcionamiento de la unidad, como a nivel de accidentes, choques, volcamientos, entre otros. Con este KPI y el anterior se pueden clasificar a los transportistas por índices de responsabilidad y compromiso hacia las best practices del transporte de la logística terrestre.
A nivel productivo y de rentabilidad, medir la cantidad de despachos por transportista en crucial para la gestión de flotas vehiculares. Este KPI logístico hace referencia a la cantidad de pedidos que un conductor suele recibir por parte de la empresa para ser entregados en una misma ruta de distribución. Mientras más pedidos por ruta sean despachados, mayor es la productividad del transportista.
Las entregas fallidas pueden producirse por distintas razones, una de las más importantes es el alto nivel de tráfico que afecta la logística de transporte. Rutas de distribución congestionadas hacen que los conductores pierdan tiempo valioso durante las entregas, especialmente las de última milla.
Así, la importancia de este indicador logístico en la gestión de flotas vehiculares es que permite contrastar la cantidad de entregas fallidas con las entregas totales. Esto con el objetivo de determinar las causas de retraso o de no llegada al destino por parte de cada conductor.
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Según el estudio Parcel delivery - The future of last mile realizado por McKinsey & Company, el proceso de entregas de última milla produce cerca del 50% de los gastos totales del transporte logístico.
Este panorama hace necesario que las empresas optimicen al máximo posible su gestión de flotas vehiculares para entregas de última milla más efectivas y a menores costos. Una potente solución para alcanzar este objetivo es el uso de software para transporte.
Este tipo de software consiste en programas online que, mediante el rastreo satelital de vehículos, las empresas pueden:
Por citar un ejemplo, la multinacional latinoamericana Agrosuper implementó el sistema de seguimiento Beetrack y con ello logró:
La gestión de flotas vehiculares es un proceso complejo y, a veces costoso. Sin embargo, el uso de sistemas digitales como el de Beetrack hace que los niveles de agilidad aumenten y los gastos operativos disminuyan.